Por Ana
León
Me encanto que pudiera dirigirme a ustedes para
este tema, porque lo considero un tema de verdad importante en donde muchos de
nosotros, llegamos pensando que estaremos en el paraíso y de repente nos
topamos con una serie de factores que provocan que un fin de semana o las
vacaciones sean un verdadero desastre.
Esto se debe a que el enfoque que se le da al
tiempo libre y al ocio, casi siempre se relaciona con no hacer nada, echar la flojera.
Esto ocurre porque nuestro modelo dual se
reduce a que o bien estamos trabajando o estamos en nuestra vida. Como si
existieran dos vidas para todos. Escuela y vacaciones. Trabajo y casa. Etc.
Es por eso que un fin de semana en la cultura
occidental o una vacación, es un tema que se toma a la ligera en muchas cosas,
porque inmediatamente nos visualizamos en una parte de NO HACER, y con ello no
necesaria de ser organizada.
Si yo les pidiera que por unos momentos
pensaran en imágenes que se relacionan con las vacaciones, seguramente las
primeras imágenes estarán relacionadas con destinos de playa, levantarse tarde,
y llevar un ritmo más relajado de actividades cotidianas.
De alguna forma lo vemos así: vacaciones=playa=
felicidad
¿Y qué ocurre cuando por diversos motivos no
podremos ir a la playa, y tampoco salir de nuestra ciudad?
Vacaciones= semanas de cursos= niños/adolescentes
menos tiempo en la casa
Y si no tenemos la economía o la forma de poder
enviar a nuestros hijos todas esas semanas a esos cursos de verano que cada día
abarcan más y más temas: Vacaciones= niños/adolescentes en casa= desastre
total!!!!!
Pues bien, me gustaría que reflexionaran
conmigo lo siguiente: “ocio y tiempo libre” son términos que han sido por años
mal interpretados por muchos.
Veamos de donde viene esta confusión, por
ejemplo la UNESCO menciona:
Según la
UNESCO "el tiempo libre es aquel, del cual dispone el individuo, fuera de
sus necesidades inevitables y obligaciones profesionales, familiares y
sociales”, por lo tanto el tiempo libre es una parte específica del tiempo de
la sociedad.
El tiempo disponible socialmente determinado para realizar
actividades recreativas, no es tiempo de recreación ni tiempo libre, sino que
lo es cuando se dan ciertas condiciones socio-económicas que permitan
satisfacer las necesidades humanas vitales. En síntesis, el tiempo libre se
dará siempre y cuando hayamos satisfecho nuestras necesidades básicas y
obligatorias y dispongamos de recursos económicos y sociales para poder
utilizar nuestro tiempo libre.
En la torre!
Yo pensé, y qué si no tengo los recursos, o si alguien considera que no me las
merezco, y de nuevo esto nos lleva a pensar en la vacación como una recompensa
de HACER y no hacer. ¿Se fijan?
Ahora bien,
el tiempo libre es incluso una materia en el Turismo, y un departamento
importante en este sector, ¿por qué? Si se supone que no es importante.
Ocio, es una
palabra que nuestros padres utilizaban mucho cuando nos descubrían echándonos
una siestecita a media semana, recuerdo bien el llamado de atención: “no estés de
ocioso” ups!!.
Pero si
buscamos en Internet o en una librería veríamos como ocio esta ligado a la
cultura, y de nuevo me pregunto: ¿Por qué el ocio se relaciona con cosas tan
hermosas y valiosas como lo son el arte?
Y el tiempo
“libre” se refiere solo al turismo,
actividades religiosas , recreativas, comida, etc, incluso al deporte. Pero eso
es hacer algo, es hacer mucho.
A poco no has
escuchado diálogos así:
A-.: Oye y
haces un deporte?
B-.: No, no
tengo tiempo.
A-.: Disculpa
tienes tiempo de meditar?
B-.: Qué acaso
crees que tengo mucho tiempo libre?
Y es que se
fijan, en el fondo sabemos que no hay un tiempo en el que en realidad no
hagamos, y en el tiempo en donde no estamos en un lugar de trabajo, o en la
escuela, o que no tenemos la presión de algún examen o entrega, es un tiempo
que nos debería llevar a poder hacer
otras cosas diferentes… que nos generen felicidad.
Es curioso
como una parte de nosotros, planea que el fin de semana o las vacaciones es
para terminar los “pendientes”, que
durante los horarios restringidos de una escuela o trabajo no puede. Y muchas
veces podemos escuchar, que al final no hicieron nada de esos pendientes.
Y el tiempo
libre, se vuelve de nuevo un punto de frustración y metas no cumplidas.
Yo creo que
el tiempo, todo el tiempo, pero en especial ese en el que no estamos estudiando
y trabajando, podemos enfocarlo a las actividades que nos impulsen a seguir
desarrollándonos, social, mental o físicamente.
Sin embargo,
esas actividades necesitan de un orden, ya que nos guste o no, el cerebro
humano así funciona. Fluimos mejor cuando tenemos ciertos limites o fronteras,
o cuando hay una guía que nos permite enfocarnos. Por eso vemos monasterios
meditativos pero con horarios que se cumplen, por eso vemos regimenes
alimenticios con tiempos marcados, por eso vemos rutinas en ejercicio
organizadas, horarios en los cines, parques y museos, ya que de otra forma
sería un caos.
El tiempo
libre y las actividades deportivas y/o recreativas están muy relacionadas, pero resulta
importante saber que en verdad, necesitamos tener esas actividades y son tan
importantes como la escuela y el trabajo.
Estas
actividades no tienen que ser iguales para todos ni tampoco tienen que estar relacionadas
siempre con dinero. Y tienen que ver con las personalidades de cada quien, si
no te gusta el FUT NO TE GUSTA, si te choca correr en el parque NO HAY forma
que lo disfrutes, pero hay muchas opciones.
Ejemplos:
1.- Hay quienes necesitan de juegos que tiendan
a la competencia como su aspecto principal.
2.- Hay quienes tienen habilidad a los juegos
de azar, o de letras, de pensar. Ajedrez, etc.
3.- Hay otras personalidades que disfrutan de actividades que alteran la conciencia y percepción
ordinaria, como tirarse un paracaídas, caballo, escalar, retos que se ven fuera
de lo ordinario.
4.- Y otros que disfrutan mucho del arte, del
teatro, de leer, etc. grupo de actividades en que se crean vínculos con el arte
o lo social.
Otro punto a reflexionar es la organización. La
organización de un fin de semana o de una vacación es más importante de lo que
creemos.
Aunque tendemos a estar, de una forma más
relajada, la organización nos permite encontrar descuentos, u opciones mucho
mejores a aquellas que encontramos cuando improvisamos.
Hablando un poco de mi, recuerdo que cuando
estaba casada decía que los fines de semana eran muy aburridos, que siempre hacíamos
lo mismo, o que yo terminaba sin hacer lo que quería, ya que de repente las únicas
actividades extraordinarias eran las comidas con las respectivas familias (les
suena?); sin embargo, cuando me separé, pensé que todo sería diferente y me sorprendí de nuevo atrapada en fines de
semana aburridos y peor aún, algunos sin mi hijo cerca, ahí fue cuando recordé, que incluso cuando vivía
soltera antes de casarme o cuando vivía con mis papas, los fines de semana me sorprendían
como una manera reactiva, y claro muchas veces sentía que terminaba haciendo lo
que los demás querían y no lo que yo quería. O terminaba invariablemente
aburrida.
Fue entonces que después de investigar y leer
un poco, tuve claro el porqué es muy importante organizarse.
Y les comparto como lo veo ahora, ya sea en fin de semana o vacación considero lo
siguiente:
1.- La intención.- defino claramente cual es la
intención de mis actividades, muchas veces organizamos cosas sin definir
claramente que es lo que en realidad queremos, y es por eso que podemos
terminar haciendo de una reunión familiar un guerra sin fronteras. O de una ida
a un spa, el momento más estresante de
la semana.
2.- Tomar en cuenta a todos los integrantes de
la actividad, es un fin de semana con mi hijo en casa o yo sola, es una vacación
que planeo con toda la familia , amigas, pareja, etc. y de ahí estar consciente
si es darme gusto por completo o compartir actividades para que todos
disfrutemos de ese tiempo, y no dejar mis necesidades a un lado.
3.- Revisar las actividades mencionadas
anteriormente, situar cual es más preponderarte para uno o para otro, con cuál
varios de los integrantes se sienten identificados, o si hay actividades compartidas en donde uno pueda correr y otro
sentarse a disfrutar de un libro, si se puede abarcar yendo a un lugar fuera
varias de estas, o si se trata de un parque, o de organizar algo en casa para
disfrutar.
4.- Armar itinerario.- es muy importante y
reconozco que yo batallo con eso, pero es importante armar horarios, de salida,
desayuno, cena , actividades, etc. porque es muy frecuente que por no
considerarlas, perdamos armonía del grupo.
5.- Informarlas, ahhhhh! Si porque eso de que
sólo estén en la cabeza de uno puede generar demasiados conflictos. Además nos
permite prevenir sorpresas si otro tiene ya alguna otra actividad que pueda
interponerse.
6.- Una que me encanta y tiene que ver con no
rigidizar esto. Toda agenda puede tener
cambios, ajustes, cancelación, etc. es una agenda con movimiento ... flexible .
¿Esto por qué? Porque al final se trata de
fluir y de buscar constantemente cosas que nos hagan felices.
Otro ejemplo:
Podemos tener una agenda para actividades en
algún lugar que visitemos esta vacación, pero tal vez cuando llegamos vimos que
estaba un espectáculo que no habíamos considerado, o tal vez alguno de los
miembros se enferme, o tal vez coincidimos con otro grupo con el cual queramos
compartir, etc. en fin, se puede hacerlo pero la organización nos permite no
perder de vista las actividades de todos, los tiempos, y muy importante, tomar
las riendas… adueñarnos de nuestro tiempo. Por ejemplo, si en un fin de semana de solteros donde no
hubo invitaciones o nuestra pareja (y/o familia) no va a estar con nosotros,
etc, no estemos achacándoles a otros nuestra falta de creatividad para vivir
nuestras vidas, por eso es importante que tengamos actividades ya planeadas que nos impidan caer en esos hábitos
que a la larga dañan nuestras relaciones.
Es mejor decirle a alguien: “no puedo porque
este fin de semana voy a ir a este museo que tengo muchas ganas”, o decirle “te
parece si llego después de esta función de cine que muero por ver”, a estar en
espera de circunstancias ajenas, como veletas del tiempo y los demás, o peor
aun en casa sintiendo que podemos estar haciendo algo más. Sentir tales vacíos
que nos lleven a escapes, vicios o depresiones. Y esto aplica también con los
niños y adolescentes. Es lógico que después estemos reclamándoles que no se
apartan del televisor, o de la bolsa de galletas, o porque esta todo el tiempo
con desgano. Es lo mismo.
En fin, este tema da para mucho, y lo estaremos
tocando todo este mes. Escríbenos tus comentarios y sugerencia y te dejo con
esto: Si estas aburrido, es porque TU aburres.